sábado, 10 de diciembre de 2011

Quiero vivir en Tierra

A pesar de que actualmente vivo en un bajo, cercano a algunos pinos, eucaliptos, algarrobos; se escuchan rebuznos de burro, voces de cerdos y pavos reales, y aves diversas que entonan su canto muy cerca, a pesar de ello sigo echando de menos pisar Tierra y ya diremos como dice el himno de los andaluces libertad. Puestos a pedir, pediremos.

No sé si esta necesidad, responde a una inclinación ancestral arraigada en antepasados cercanos que vivieron plenamente en un entorno natural, lo cierto es, que no dejo de ser un urbanita( por otra parte) al que le gustan que las comodidades no estén demasiado lejos. Sin embargo me da la sensación de que me estoy perdiendo algo importante, para tener una plena conexión con el mundo en que vivimos o diremos malvivimos. Porque todo transcurre de forma frenética, y los días se van marchando sin dejar nada constructivo, la vida pasa y no nos da tiempo a saborearla. Al menos a mi me pasa.

Pienso que una vez pudiera yo plantar mis tomates, mis calabacines, mis lechugas, y que me crecieran......tendría una vida mejor, por lo menos llevaria una vida más natural. Y con toda seguridad influiria en mis bioritmos internos que como casi la mayoría vivimos al borde de un ataque de ansiedad, o como mínimo acelerados y desprovistos de recursos para detener el tren que ciegamente se lleva nuestras vidas.

Y si sólo se quedara ahí..........esa velocidad es la misma con la que el planeta se está deteriorando, eso dicen los científicos no cualquier agorero, ellos se han convertido en visionarios o en matemáticos que predicen le existencia finita a la que nos enfrentamos. El fin del mundo está cerca según parece, así que será mejor que realicemos nuestros sueños lo antes posible, tal vez valga este para que nos tiremos de cabeza y cojamos al toro por los cuernos en nuestras vidas.

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